17 de junio de 2007

La cadencia nos inunda,
nos amarra
y atraviesa.
Provocaré tu hambre,
para luego saciarla.
Déjate seducir,
que cada tono
sea el preludio de un infierno...
de pasiones desenfrenadas


http://www.youtube.com/watch?v=u1c6QuIcc1o

1 comentario:

Los Tacones Rojos dijo...

Querido Antonio,
Aunque hace algún tiempo que no paso por la bloggosfera, he regresado. Tu poema es precioso, lleno de vida. Se nota que ponesentusiasmo en tus escritos. Lo mejro de todo, es que puedan estar dirigidos a alguien que haga latur más fuerte tu corazón. Muchos besos!!